EL FÚTBOL COMO ELEMENTO MOVILIZADOR EN LAS REVUELTAS ANTIGUBERNAMENTALES DE ORIENTE MEDIO: TÚNEZ (V)

febrero 28, 2011

Los ultras se convirtieron en el fenómeno social de masas más importante de Túnez durante el primer decenio del siglo XXI. Tras conocer como este emergió a finales de los años noventa, en la presente entrada nos referiremos a aquellos elementos que provocaron su decadencia poco tiempo después. Contrariamente a lo que sucede en Europa, los ultras tunecinos no se organizaron en colectivos estructurados sino que estos carecieron de jerarquía, siendo a la vez grupos muy permeables.

tifo de la afición esperantiste en el estadio El Menzah de Túnez

DAKHLETS: LAS COREOGRAFIAS DE LAS GRADAS

A pesar de esta ausencia de vertebración, los hinchas radicales animaron a sus equipos mediante coreografias participativas similares a aquellas que en el argot ultra se conoce como ‘tifos’ (de la palabra homónima italiana que deriva de ‘tifosi’, nombre que reciben los aficionados al deporte en el país transalpino) y que en el caso de Túnez se denomina ‘dakhla’ (que podíamos traducir como ‘entrar en materia’ en lengua árabe). Estos ‘dakhlets’ se distinguían por un enorme colorido, con profusión de banderas, banderolas con eslóganes, pancartas y bengalas. Otra de las características que definieron la eclosión del fenómeno ultra en Túnez fueron los desplazamientos de los hinchas y los cánticos que estos coreaban. De gran riqueza verbal, suelen ser ocurrentes y contener referencias políticamente incorrectas. Su lenguaje ordinario permitió su popularización entre los jóvenes.

INTERVENCIONISMO ESTATAL Y DECLIVE DEL MOVIMIENTO ULTRA

La magnitud del fenómeno ultra provocó la intervención del Estado que trató de minimizar su incidencia entre la juventud mediante una política represiva arbitraria.Las intervenciones gubernamentales se basaron en un conjunto de medidas de seguridad drásticas, que junto a la criminalización mediática a la que se sometió a los ultras y los procesos judiciales que se derivaron de las actuaciones policiales prácticamente acabaron con el movimiento ultra. Se prohibieron los ‘dakhlets’, las bengalas y se vetó el uso de distintivos o banderas de los colectivos de hinchas radicales. De esta manera el ambiente festivo que recreaban los ultras dejó paso a otro en el que la tensión entre grupos de hinchas radicales fue el elemento principal. Las gradas dejaron de ser un lugar de reunión y convivencia para ser un foco de hostilidad. La misma estalló durante la temporada 2010-2011, incluso entre grupos de un mismo club, como ocurrió con los seguidores del Espérance Sportive de Tunis que se enfrentaron entre si durante un partido de liga que disputó su equipo contra el Espérance Sportive de Zarzis y también en ocasión de un encuentro correspondiente a la Champions League africana que disputaron el Espérance Sportive de Tunis y el Tout Puissant Mazembe de la República Democrática del Congo. Atrás quedaron los años en que los ‘dakhlets’ y las canciones agrupaban a los seguidores mediante la originalidad y la creación.

A pesar de la rivalidad existente entre los distintos clubes del país, sus grupos ultras consiguieron unir sus fuerzas en el año 2010 en el autodenominado Rassemblement des Ultras Tunisiens (RUT), una organización que pretende erigirse en altavoz público de sus demandas.

logotipo del RUT, asociación que pretende aglutinar a los ultras tunecinos

ULTRAS EN TÚNEZ: UN INTENTO DE EQUIPARACIÓN SINGULAR

Paradójicamente, la fuerte influencia francesa en el país, derivada de la presencia colonial desde que en 1881 Túnez pasase a ser un protectorado de Francia hasta su independencia en 1956, no se visibiliza en los grupos ultras tunecinos. Estos manifiestan un culto extremo al llamado modelo ultra italiano, basado en las coreografias (tifos o ‘dakhlets’) y los cánticos. Prueba de ello son los nombres de los grupos, las melodías de las canciones que corean en las gradas e incluso los eslóganes que reproducen en sus pancartas y su merchandising. Sin duda que en un país francófono la referencia más importante provenga de Italia no deja de ser sorprendente, aunque pueda concibirse dado que la longeva tradición ultra italiana ha ejercido de modelo a imitar en la reproducción del fenómeno fuera de Europa ante la escasa popularidad del movimiento supporter en Francia, el cual a su vez también tomó como referente a los ultras transalpinos.

Esta preponderancia del modelo italiano en los grupos ultras de Túnez, y por extensión en el resto de países norteafricanos, puede generar otras líneas de debate alrededor de si su adopción explicita un rechazo de las influencias de la antigua metrópolis por parte de las nuevas generaciones tunecinas. Un intento de equiparación que sin duda refleja las transformaciones sociales que ha sufrido el país en los últimos años como evidenciaron las protestas contra el gobierno de Ben Alí.

grafitti antipolicial de la hinchada esperantiste


EL FÚTBOL COMO ELEMENTO MOVILIZADOR EN LAS REVUELTAS ANTIGUBERNAMENTALES DE ORIENTE MEDIO: TÚNEZ (IV)

febrero 21, 2011

Tras referirnos en nuestro anterior entrada a la coyuntura social suscitada a raíz de las protestas contra el régimen de Mubarak en Egipto, en esta ocasión vamos a hacer hincapié en la situación que generaron las mismas en otro país africano, Túnez, en relación al fútbol. De hecho fue en este estado limítrofe con Libia y Argelia donde comenzaron estas revueltas de carácter antigubernamental que luego se expandieron a Oriente Medio. Iniciadas a mediados de diciembre con el objetivo de derrocar al presidente Zine El Abidine Ben Alí, las protestas persistieron tras el abandono del máximo mandatario.

manifestación conjunta de ultras tunecinos contra la represión

LA IMPLICACIÓN DE LOS HINCHAS RADICALES EN LAS PROTESTAS TUNECINAS

Los disturbios generados tras la violenta represión policial de las manifestaciones contra Ben Alí repercutieron también en el fútbol. La competición de liga se detuvo, en un primer momento, hasta el mes de febrero. La suspensión del campeonato nacional provocó las iras de los aficionados. Hinchas de los dos equipos más importantes del país, el Al Nadi Al Afriqui (más conocido como Club Africain) y su rival el Espérance Sportive de Tunis se manifestaron conjuntamente en la Avenida Habib Bourguiba de la capital de Túnez para pedir el levantamiento de las restricciones impuestas en los estadios por el régimen. Una manifestación de alto contenido simbólico si tenemos en cuenta que dicha calle es la misma por la que diariamente desfilaban los tunecinos que protestaban contra el gobierno de Ben Alí. Con todo, los seguidores no contemplaban ningún trasfondo político en sus demandas. Mientras algunos hinchas coreaban consignas como ‘Ultra, libertá’, otros gritaban eslóganes a favor del fin de la suspensión del campeonato y contra las sanciones a los aficionados. Sus peticiones, entre las que se encontraban la legalización de nuevo de la práctica de encender botes de humo y bengalas en las gradas y de la exhibición de pancartas de grandes dimensiones prohibidas bajo el argumento de que mostraban mensajes ofensivos e indecentes, más allá de evidenciar la disconformidad de los ultras contenían un trasfondo simbólico que las equiparaba con las reivindicaciones de los manifestantes antigubernamentales que protestaban contra la represión policial ejercida por el régimen.

la hinchada del Espérance Sportive de Tunis en plena ebullición en el estadio Olímpico El Menzah

ECLOSIÓN DEL MOVIMIENTO ULTRA TUNECINO

El norte de África acoge a los tres países en que el llamado movimiento ultra ha llegado a consolidarse con mayor firmeza. Egipto, Marruecos y Túnez son los estados donde el fenómeno se ha desarrollado desde la década de los noventa a raíz de la creación de sus primeros grupos organizados de hinchas, pioneros en el continente.

En Túnez dicho fenómeno ha emergido en los clubes más relevantes de la capital, los mencionados Club Africain y Espérance Sportive de Tunis. Sus ultras se congregan en las llamadas curvas de los estadios, zonas ubicadas detrás de las porterías. Los del Club Africain se agrupan en el fondo sur del Estadio Olímpico El Menzah, mientras que sus rivales se reúnen en la grada sur. Los más veteranos son los conocidos ‘clubistes’ (aficionados del Club Africain) que cuenta con el grupo más longevo del país, los llamados African Winners (creados en 1995) que se situan en el bloque 15 del estadio. Otros grupos de hinchas radicales del Club Africain son los Leaders Clubistes (gestados en el año 2003 y ubicados en el bloque 17) o los North Vandals (en activo desde el año 2007). Por su lado el Espérance Sportive de Tunis cuenta con colectivos ultras como Torcida Esperantistes (creado en 2008), Supras Sud (activos desde el año 2004), Blood and Gold (fundados en el 2005), Zapatista Esperanza (animando al club desde 2007), Matadors (desde 2008), Rasta Fedayn (creados en 2006) o los Ultras L’Emkachkhines o ULE 2002 (nombre que hace referencia a la fecha de su fundación que coincidió con la disputa de un partido de la Champions League africana contra un equipo egipcio.

manifestación de protesta conjunta de ultras en la capital del país


EL FÚTBOL COMO ELEMENTO MOVILIZADOR EN LAS REVUELTAS ANTIGUBERNAMENTALES DE ORIENTE MEDIO: EGIPTO (III)

febrero 18, 2011

Como ya explicamos en nuestra anterior entrada el papel de los aficionados al fútbol en las protestas contra el régimen de Mubarak ha sido destacado. Los ultras del Al Ahly aportaron su organización, desarrollada durante los años en que han desplegado su actividad en semiclandestinidad, a los manifestantes de la Plaza Tahrir y sus barrios más cercanos. Ejercieron como miembros del servicio de orden, controlando accesos, evitando pillajes e incluso se les pudo ver festejando la marcha de Mubarak enarbolando diversas bengalas.

seguidores egipcios durante el partido que enfrentó a Egipto con Argelia

EL FÚTBOL COMO ESPACIO DE DISIDENCIA

El activismo de estos jóvenes ultras sólo se puede explicar por el componente extra deportivo del fútbol egipcio. En un país convertido en una sociedad parapolicial, donde nada escapaba al control férreo del Estado, el fútbol se erigió en uno de los pocos espacios donde los ciudadanos podían evadirse de la cotidianidad. Una circunstancia que podemos hacer extensible a otros países de Oriente Medio y el Norte de África que cuentan con regímenes autoritarios similares.

En Egipto, durante la década de los setenta se prudujo un proceso de substitución que culminó con la ocupación del centro de la vida ciudadana por parte del fútbol en detrimento de la política. Así lo afirman entre otros el periodista David Goldblatt, cuando describe como el fútbol egipcio se ha convertido en un espacio de expresión y emoción en una sociedad policial donde los espectadores liberan sus frustraciones, o Mohammed Tawfik, autor de la monografía Masr Bitil’ab (Egipto está jugando) que describe los primeros años de vida del Al Ahly. Este proceso de despolitización de la sociedad egipcia incidió sobremanera en la juventud. Según Tawfik la indiferencia de los jóvenes por la política fue inversamente proporcional al aumento del fanatismo de los seguidores de fútbol. Así podemos establecer con rotundidad un paralelismo entre la aparición de los primeros grupos ultras en el fútbol egipcio y la desmovilización política de la juventud. No es de extrañar pues que muchos de ellos a pesar de declararse apolíticos desempeñaran funciones cruciales en las movilizaciones contra Mubarak.

Ultras White Knights, hinchas radicales del Zamalek en las gradas del estadio Internacional de El Cairo

ULTRAS CONTRA LA REPRESIÓN GUBERNAMENTAL

En este punto, cabe apuntar como las mismas fueron percibidas por los ultras como acciones contra la represión, policial y gubernamental, sin el pósito ideológico que asoció a las protestas con las aspiraciones democráticas de los agitadores más politizados. No en vano cabe recordar como el enfrentamiento entre ultras y fuerzas del orden durante los últimos campeonatos de liga se había saldado con diversos seguidores detenidos y puestos a disposición judicial con cargos por desórdenes.

No ha sido hasta la emergencia de nuevas formas de activismo en línea gestadas alrededor de las llamadas redes sociales, cuando los jóvenes han retomado su interés por la política.

Ultras Alhawy en acción durante el derby contra el Zamalek


EL FÚTBOL COMO ELEMENTO MOVILIZADOR EN LAS REVUELTAS ANTIGUBERNAMENTALES DE ORIENTE MEDIO: EGIPTO (II)

febrero 15, 2011

La dimisión de Hosni Mubarak tras más de tres semanas de protestas en Egipto ha abierto un periodo de incertidumbre sobre como el ejército resolverá la crisis institucional que se ha cernido sobre el país. Mientras las revueltas se extienden a cada vez más estados de la zona, como Bahréin, Yemen o Irán, los militares han tomado el poder. La ciudadanía sigue a la expectativa de si realmente la marcha del rais se traducirá en  transformaciones reales en la economía y una transición democrática.

incidentes entre hinchas del Al Ahly y el Zamalek durante el derby

LA PERPETUACIÓN DE LOS ESTEREOTIPOS: ZAMALEK Vs AL AHLY

En nuestra anterior entrada ya nos referimos a la pugna tradicional que mantienen ambos clubes desde décadas pretéritas. Más allá de la rivalidad deportiva, esta confrontación se traslada al ámbito socio- político. El Zamalek, ligado a las clases acomodadas del país, y el Al Ahly, representante de las clases populares, también han mostrado sus divergencias durante el conflicto que ha comportado la dimisión de Mubarak. Diversos jugadores de ambos equipos se han posicionado durante estos días. Este fue el caso del centrocampista del Zamalek Hassan Mostafa manifestó su deseo de que el rais acabara su mandato como presidente para evitar un ‘enfrentamiento entre compatriotas’. Por su parte, jugadores del Al Ahly como Shehab Ahmed se solidarizaron con las protestas creando un fondo de ayuda económica para las víctimas de las revueltas y promoviendo una donación de sangre para cubrir las demandas hospitalarias. La plantilla del ‘equipo del pueblo’ simbolizó su adhesión a las manifestaciones antigubernamentales iniciando uno de sus entrenamientos con un minuto de silencio en recuerdo de los muertos durante las mismas. Esta actitud contrasta con la que han mantenido sus rivales del Zamalek, que con la competición de liga parada y la convulsa situación que vive el deporte egipcio y el país han decidido disputar el partido de la Confederation of African Football Champions League que les enfrentará al Ulinzi Stars de Kenia en Libia.

hinchada del Zamalek animando a su equipo en su estadio

Este cúmulo de gestos ha provocado la perpetuación de los estereotipos con los que durante décadas se ha identificado a ambos clubes. Así, el Al Ahly se ha alineado junto a los agitadores contrarios al régimen mientras que el Zamalek ha adoptado una postura menos beligerante. Una vez más, el equipo del pueblo se ha enfrentado simbólicamente al equipo del gobierno.

el veterano portero de la selección egipcia Nadar Al- Sayed, uno de los deportistas críticos con el régimen de Mubarak

DE FUTBOLISTAS POPULARES A MANIFESTANTES ANÓNIMOS

Más allá de la significación de los jugadores de los dos clubes más importantes del país, otros futbolistas también han simpatizado con las protestas antigubernamentales. Este es el caso del defensa del Al- Ittihad Al- Sakandary, club también conocido como Union Alexandria, y de la selección egipcia Ibrahim Said, que participó diariamente en las protestas acontecidas en la ya célebre Plaza Tahrir de El Cairo. Otros futbolistas que se mostraron a favor del relevo de Mubarak al frente del país fueron el centrocampista del Ismaili, Hosni Abd- Rabou, o el carismático y veterano guardameta de la selección nacional egipcia Nadar Al- Sayed. El propio Abd- Rabou declaró al respecto: ‘Apoyo al 100% a la población y sus legítimas demandas. Muchos compatriotas viven en condiciones muy difíciles. Muchos de nosotros venimos de familias pobres y, por tanto, entendemos el sufrimiento de la gente’.


EL FÚTBOL COMO ELEMENTO MOVILIZADOR EN LAS REVUELTAS ANTIGUBERNAMENTALES DE ORIENTE MEDIO: EGIPTO (I)

febrero 8, 2011

A mediados de diciembre se convocaron las primeras manifestaciones en Túnez contra el gobierno presidido por Zine al Abidine Ben Alí. Comenzó así una espiral de protestas contra el régimen tunecino que poco después se extendería a otros países árabes como Siria, Argelia, Marruecos, Jordania o Egipto. La ciudadanía tunecina expresó mediante las movilizaciones su malestar ante el aumento del paro (que sobrepasa el 15 % de la población activa con especial incidencia en la juventud) y el desplome de la economía agravada por la alta inflación, producto del descenso de la inversión extranjera en el país a raíz de la crisis internacional.

Los jóvenes, principales víctimas de la situación, se erigieron en los principales protagonistas de las protestas populares. Así fue como muchos de ellos, hastiados por la corrupción y el nepotismo de la clase dirigente y frustrados ante las escasas expectativas de prosperidad se lanzaron a la calle demandando mejoras económicas y sociales.

un manifestante enmascarado quemando un retrato de Mubarak

EL FÚTBOL EGIPCIO COMO REFLEJO DE LA REVUELTA CONTRA MUBARAK

Rápidamente, gracias en parte a los canales de difusión que ofrecen las redes sociales, las protestas de Túnez se extendieron a otros países del entorno. En Egipto, por ejemplo, las mismas se han vinculado a la rivalidad que mantienen los dos clubes más importantes de la capital: el Al Ahly Sporting Club y el Zamalek Sporting Club. Según el filósofo israelí Avishai Margalit, miembro del Instituto de Estudios Avanzados de Princeton, las movilizaciones contra el régimen de Mubarak se gestaron alrededor de la pugna futbolística que mantienen ambos clubes de El Cairo.

EL EQUIPO DEL GOBIERNO CONTRA EL EQUIPO DEL PUEBLO

Así, mientras el Al Ahly se erigió en el club más admirado en los barrios populares de la capital egipcia, su rival el Zamalek representa sociológicamente al régimen del rais Hosni Mubarak y a las clases acomodadas residentes en la zona más elitista de El Cairo, la isla de Zamalek próxima a Guiza. Creado en 1911 bajo el nombre de Al Qasr al-Nil, la trayectoria deportiva del Zamalek le llevó a conquistar 11 títulos de liga ante los 35 de su máximo rival. Por su parte, el Al Ahly también ostenta unas connotaciones extra deportivas más que evidentes, no en vano su propio nombre significa en árabe ‘El Nacional’. Ya en el momento de su fundación, acaecida en 1908, se le identificó con los partidarios de la descolonización puesto que la mayoría de sus primeros socios fueron estudiantes, que aquella época conformaban el principal foco de resistencia contra la ocupación británica. El club se convirtió así en el máximo representante del nacionalismo egipcio. Este hecho le conllevó atraer un inmenso apoyo popular y fue uno de los motivos que provocó que el Al Ahly aglutinará a cerca de 50 millones de aficionados repartidos por todo el continente africano, aunque en 1925 sus directivos decidieran admitir únicamente a aquellos socios que fueran egipcios, de ahí que sea conocido popularmente desde entonces como ‘el equipo del pueblo’. La rivalidad existente entre ambos clubes es tal que el llamado ‘Derbi de El Cairo’ es arbitrado por colegiados extranjeros y disputado en un terreno neutral.

coreografia de los ultras Alhawy en su estadio durante un partido de liga

A pesar de esta enemistad tradicional en estos últimos años la hostilidad entre los grupos de seguidores radicales de ambos equipos se ha atenuado desde los violentos altercados que protagonizaron durante el derbi disputado en 1996. La trayectoria deportiva del Zamalek también ha provocado que los seguidores radicales del Al Ahly, agrupados en los grupos Ultras Ahlawy y Ahly Lovers Union, hayan dirigido su animadversión contra los aficionados del Ismaily Sporting Club, el equipo que en los últimos años ha disputado el título de liga al Al Ahly.

EL FÚTBOL COMO AGENTE MOBILIZADOR

La masa social del Al Ahly proporcionó las bases para la movilización contra el presidente Mubarak. Según Margalit, los aficionados del club fueron los primeros en articular el soporte sobre el que se articularon las primeras protestas contra el régimen. Aunque difusas, estas se gestaron en las gradas del Cairo International Stadium. De hecho, los ultras del Al Ahly han desempeñado un papel destacado y muy activo en las movilizaciones anti- Mubarak junto a trabajadores, estudiantes e islamistas. A pesar de que el grupo radical en su página facebook se declaró políticamente neutral sí que dio libertad de acción a todos sus miembros. Así, algunos de ellos se han organizado para controlar los accesos a diversos barrios de la capital mientras otros se han sumado a la cadena humana que se formó alrededor del Museo Egipcio para evitar que este fuera saqueado.

logotipo de la Asociación Egípcia de Fútbol

La suspensión indefinida de la liga egipcia y del partido que tenía que disputar la selección nacional contra los Estados Unidos hasta que ‘las protestas sean sofocadas’ por parte de la Asociación Egipcia de Fútbol (EFA) también ha fomentado la movilización de la mayoría de los jóvenes ultras del Al Ahly que han trasladado su activismo de las gradas a la plaza Tahir para intentar derrocar al presidente Mubarak. En un país controlado por el ‘mujabarat’ (aparato de inteligencia de los cuerpos de seguridad del estado), el fútbol ha sido uno de los pocos espacios públicos que han evitado el férreo control gubernamental.


SAPEURS DE BAKONGO, UN ESTILO DE CONTRASTES AFRICANO (III)

febrero 6, 2011

El estilo se expandió por todo el país aunque su epicentro se encuentra en el barrio de Bakongo de Brazzaville, la capital de la República del Congo. En dicha ciudad, locales como La Main Bleue o Palais du Parlament se han convertido en referentes del estilo. En ellos se celebran bodas, fiestas y otros eventos a los que habitualmente acuden las grandes figuras de la llamada ‘sapologie brazzavilloise’, como Freddy Ndouri, presidente de la SAPE en el país, o Samba Le Maire.

sapeurs congoleños luciendo sus galas en las calles de Paris

EXTRACCIÓN Y ASCENSO SOCIAL, EL CULTO A LA APARIENCIA

Contrariamente a lo que puede parecer si sólo reparamos en su estética, los orígenes sociales de los sapeurs son modestos. Acostumbran a ser profesionales del sector de servicios, como ‘chauffeurs’ (taxistas), guardias de seguridad, mecánicos, agentes comerciales o carpinteros, aunque los más jóvenes sueñan con ser modelos. No todos pueden llegar a convertirse en sapeus. Existen unos requisitos que se consideran imprescindibles: una altura mínima de 1,70 cm y un rostro sin defectos visibles. Estas exigencias físicas se complementan con las normas de elegancia establecidas por la SAPE sobre la combinación de colores en la vestimenta, los hábitos en la manera de caminar e incluso la actitud y manera de comportarse de forma correcta y expresarse con un lenguaje refinado y elegante.

A los sapeurs les une la voluntad de aparentar, de ser respetados por la comunidad. Ello les equipara con otros estilos aparecidos en Europa, como los teddy boys británicos, que en la década de los cincuenta del siglo pasado adoptaron la estética edwardiana, característica hasta entonces de los dandies de clase alta, para mejorar su estatus social. El estilo sapeur, por tanto, refleja en forma de metáfora social este deseo de ascenso de sus seguidores.

joven sapeur a las puertas de su vivienda

Su elegancia resulta obsesiva, sobretodo si tenemos en cuenta las condiciones de vida precarias en que subsisten la mayoría de ellos. Priorizan su obcecación por la imagen y el culto a marcas como Pierre Cardin, Roberto Cavalli, Dior, Gucci, Yves Saint Laurent, Versace, Gaultier, Fendi, Prada o Issy Miyake a cubrir otro tipo de necesidades básicas, como explicita uno de ellos: “un sapeur congoleño es feliz incluso si no come”. Este culto por la estética impecable les obliga a pagar el vestuario mediante créditos. Algunos incluso llegan a desembolsar grandes cantidades por sus trajes y complementos, algunos de los cuales compran en Paris o a través de compatriotas residentes en la capital francesa. Además de Paris, los sapeurs también son visibles en otras ciudades europeas con cierta presencia de emigración congoleña como Bruselas.

sapeur luciendo la estética de la nueva tendencia con influencias británicas

LA EXTENSIÓN DEL ESTILO, NUEVAS TENDENCIAS

Con la llegada del siglo XXI el estilo ha logrado expandirse por todo el país y transformarse. Han surgido tendencias dentro del mismo, como la que ha tomado como referente la moda londinense en vez de la parisina. Esta nueva corriente dentro de la ‘sapologie’ se caracteriza por el uso de la falda escocesa en lugar del traje de corte tradicional, tomando como referente estético al príncipe Carlos de Inglaterra. Entre los complementos de esta nueva corriente destacan también las americanas, las corbatas, las boinas escocesas y los calcetines a la altura de las rodillas.

A pesar de que el estilo sapeur se reduce al género masculino y la figura de la mujer ha restado marginal, poco a poco esta se ha ido incorporando al mismo. Este es el caso de la actriz Jenny Hill, que suele lucir la estética característica de los sapeurs. Con todo, el rol de la mujer dentro del estilo sigue siendo secundario.